Saturday, March 18, 2006

replanteamientos sobre el arraigo

Recuerdo haber desarrollado algunas ideas acerca del arraigo desde la lectura de unos textos de la Odisea y algo no me sonaba del todo bien... había algo inquitante entre líneas... pues, bien, acá va un replanteamiento. Dije que el arraigo o la idea del hogar surgía más bien de edificaciones y condiciones internas de las personas. Y, si bien aún lo creo, creo también que quedó al margen lo del lugar en sí. Esa idea de hogar no es aislable del lugar físico como tal, el lugar conforma la familiaridad, gatilla la experiencia de hogar, de arraigo. Sus paisajes, los puntos exactos donde se realiza una determinada actividad, sus escondites y escenarios son esenciales en cuanto se convierten en espacios familiarizados o "lugares", en este caso lugares-hogar. Estos lugares-hogar aparentemente se forman en el primer lugar que hayamos sentido como hogar y llevaríamos sus códigos (de familiaridad hogareña espacial) con nosotros 4 ever... Y ojo, no creo que los códigos de familiaridad sean solo territoriales sino también se refieren a la cultura y a los modismos relacionales entre las gentes de esa localidad.
ya. creo que me puse muy compleja por hoy. ¿se entendió algo? de ahí me comentan, salud!

Sunday, March 05, 2006

grecia...

"Hablame, Musa, de aquel varón de multiforme ingenio que, después de destruir la sacra ciudad de Troya, anduvo peregrinando larguísimo tiempo, vió las poblaciones y conoció las costumbres de muchos hombres y padeció en su ánimo gran número de trabajos en su navegación por el Ponto, en cuanto procuraba salvar su vida y la vuelta de sus compañeros a la patria. " Homero, La Odisea
Pienso: El viaje/experiencia se anida en los albores de la civilización occidental, Ulises deja su patria, y por enfurecer a uno de sus dioses no se le permite volver a casa, convirtiéndose en un viajero errante que no logra llegar a su destino. Su intento de hacer puerto se transforma en uno de los grandes textos literarios de la historia de occidente y a su vez, una poética del viaje, del deseo y la condición humana. Ulises navega enfrentando multiples desafíos para llegar a "casa". La imagen de su casa, de lo que le espera ahí se mantiene detenida en el tiempo, igual a como la dejo al partir. La imagen se ha convertido en un ideal que exhala calidez, color, melodia, recuerdo, y, sabores y olores de una delicia inigualable. Poco sabe el de como este ha cambiado con los tiempos, de las costumbres de Penelope, de como la invocación de ese lugar proviene de el mismo, de su necesidad de casa, de lo que el aprendió a reconocer como casa y no del lugar en sí. El arraigo al lugar aparentemente se ancla en lo que este significó, de lo que se vivió ahí y lo que se simbolizó entre sus tierras. El arraigo pareciese ligarse a la invocación de lo que se forjó en nuestros imaginarios como hogar y trasciende el hecho de si este existe realmente, si existió o si fue imaginado...

la ruta II

Dice Auster:
"Adventures, misadventures, detours, new resolves, struggles, happenstance, progress, setbacks, and through it all, the gradual dawning of conscience" Paul Auster, The Invention of Solitude


"Aventuras, desventuras, desvíos, nuevas resoluciones, luchas, casualidad, progreso, reveses, y a través de todo, el despertar gradual de la consiencia", Ok, ya se... Auster no se estaba refiriendo a la ruta sino a los sucesos, conflictos y resoluciones presentes en el desarrollo la versión original de Pinocchio, pero que falto de imaginación sería quedarse en ello. Estos sucesos, conflictos y resoluciones no solo son centrales en el desarrollo de la narrativa sino también de la experiencia humana en general y, porque no decirlo, de toda ruta. Estos elementos son a la ruta como los buenos ingredientes son a la preparacion de un buen plato y la ruta sería como la preparación de un plato que puede tener infinitos destinos (incluido tener que ser botado por completo a la basura cuando se ha sido demasiado experimental y el plato se escapa por completo de tus manos). Son los ingredientes de esta ruta en conjunto con la trayectoria que confabularán nuestra experiencia, y esta depende de cada persona (y no todos son buenos cocineros...). Esta el antes y el depués del viaje, en el intertanto, los ingredientes y la receta cambian al viajero. Talvez el viajero cambie mucho o talvez los cambios sean tan imperceptibles que nadie advierta que este alguna vez se alejó de su hogar, las posibilidades son infinitas y todos alguna vez en su vida experimentan la ruta. Ahora, pongamosnos en una nueva situación, que pasa si el viajero parte y no puede regresar, si de tanto tiempo en ruta su hogar deja de existir, si de tanta complicación o revés no puede volver, o si el viajero cambia tanto en el viaje que ya no reconoce su hogar... ¿Que pasa cuando la ruta o el camino se transforma en una constante? ¿Que pasa si se convierte en una busqueda de un fin o una llegada de dimensiones desconocidas en el que el alma navega esperanzada de encontrar un puerto? ¿Que pasa con los marineros de este oceano? ... como siempre, la pregunta queda abierta...